Una clínica privada de Tartagal fue clausurada por presentar numerosas irregularidades, aunque ayer el ministerio de Salud le otorgó otros 180 días para que regularice su situación. La misma es prestadora del PAMI.
Ayer jueves por la tarde, se supo que el Ministerio de Salud otorgó un plazo de 180 días para que la Clínica Divina Misericordia subsane cada uno de los puntos de la Resolución que establecía su clausura, la cual había sido informada en el Boletín Oficial el pasado 13 de julio.
FM Alba de Tartagal informó oportunamente detalles de la decisión gubernamental que se remonta a una causa abierta hace 11 años y que fue evaluada reiteradamente y que culminó hace una semana con un texto de cuatro hojas en donde se detallaban las irregularidades que iban desde la falta de la habilitación emitida por Bomberos, pasando por la ausencia de un grupo electrógeno para las áreas críticas, hasta la no presentación de la nómina de personal en blanco. Por ello se el cierre temporario de la clínica que sin embargo siguio trabajando normalmente.
Como era de esperarse, tal clausura preocupó al personal de la Clínica y a los directivos de la empresa deslizando a que su actual director – Dr. Pablo Tejerina Sosa – se reuniera con el ministro del area – Roque Mascarello – para curiosamente exlicarle que desconocía la situación del sanatorio porque nunca fue informado de la situación por sus anteriores gerentes. El estrafalario argumento dio resultados y el ministerio de Salud determinó otorgar un plazo de 180 días para que se regularicen los puntos mencionados y la presentar un plan de solución para las observaciones que detalló la Resolución 1137.
Conviene recordar que la Clínica es prestadora de PAMI y además trabaja con las obras sociales IPS y OSECAD. En actualidad afronta un concurso de quiebra, sumado a serios reclamos y quejas. Afirmaciones extraoficiales aseguran que se evaluarán todas las medidas posibles para evitar el cierre y salvar el trabajo del personal; que suma 80 personas.