Así lo señaló Lucas Tognolini, secretario adjunto de APSADES. Comentó que pasaron de tener 200 a 100 profesionales de la salud.
La situación en el Hospital Juan Domingo Perón es acuciante. Así lo manifestó el secretario adjunto de APSADES, Lucas Tognolini. Comentó a la prensa capitalina que hace 5 años tenían alrededor de 200 personas trabajando en el nosocomio; ahora son 100. Es decir, se redujo el personal a la mitad, en tanto la situación de pandemia agrava todo.
“El cuadro de cargos no se cubrió. No tenemos cirujano ni anestesista, de 8 neonatólogos se jubilaron 4, mientras que de 11 obstetras quedaron solo 7”, describió en FM Aries Tognolini. Luego acotó que la falta de médicos hace que el trabajo en este nosocomio “no se puede soportar”.
Entre las razones que estimó el secretario de APSADES para la falta de médicos en el interior provincial están los magros sueldos. El Estado paga 600 pesos la hora de trabajo en las localidades del interior salteño, en tanto que son 1500 por hora en la Capital. “Así es imposible, nadie quiere ir en condiciones al interior”, argumentó.
“Es algo que se puede solucionar, el tema son las condiciones en las que el Estado quiere que los profesionales vayan; por ejemplo, en Cafayate y Cachi siguen algunos médicos que vinieron en la gestión de Roberto Romero, vinieron a firmar su planta permanente y se les otorgaba hasta casa”, relató Tognolini.