La fiscal de derechos humanos se refirió de esta manera al pedido que realizaron algunos diputados salteños. Aseguró que con las armas que cuenta la policía local es suficiente.
Sigue la polémica por el pedido de legisladores provinciales -como Ignacio Jarsún- para armar a la policía salteña con pistolas taser. Las declaraciones de la fiscal de DDHH, Verónica Simesen de Bielke, en FM Aries fueron contundentes.
«Yo entiendo que no es un recurso necesario en estos momentos en Salta», aseguró. Esto viene ligado a que nuestra provincia, según la fiscal, los criminales y delincuentes no están armados en un nivel superior a la policía, como puede suceder en Rosario o Buenos Aires.
En ese sentido, Simesen de Bielke apuntó que la policía salteña ya cuenta con armas no letales. Es el caso de las balas de pintura y las de goma. «Con esas armas tenemos un montón de personas que han perdido la vista y lesionadas hasta con 17 impactos de balas de goma en el cuerpo», indicó.
Respecto al pedido en la legislatura salteña, la fiscal aseguró estar preocupada. «Cuando un legislador presenta un proyecto, lo primero que tiene que ver es si ese proyecto puede pasar lo que se llama el control de convencionalidad. Hablamos de derecho y de derecho constitucional», comentó.
Luego la fiscal detalló que un proyecto de las características como el que propone el diputado Jarsún es totalmente contrario a la convención contra la tortura, al que suscribió Argentina «y tiene rango constitucional».
Otra de las preocupaciones que reveló la fiscal fue la garantía de que armas como las taser no serán utilizadas contra ciudadanos que no estén cometiendo crimen alguno. Una práctica que suele repetirse en la policía salteña, que en diversos casos por detener a un delincuente terminan arremetiendo contra inocentes. Además Simesen de Bielke recordó los varios casos en los que fallecieron personas por el uso de estas pistolas. «Las taser no son armas no letales», aseguró.