La situación no da para más, así lo entendieron los vecinos de Aguaray. La gestión del intendente acusado de robar caños agoniza y podría desatar una pueblada.
Días atrás el intendente Jorge Enrique Prado fue apurado por los pobladores de Aguaray para que explicara a dónde fue a parar el dinero girado por Nación como Fondos Covid. Una muchedumbre se apostó fuera del edificio municipal. Prado dispuso patovicas para que cuidaran el perímetro de la Municipalidad. Entre otros reclamos, pedían la renuncia del jefe comunal que saltó a la fama nacional por estar implicado en el robo de caños del gasoducto NEA.
Hoy la novedad que llega desde Aguaray es que el descontento permanece, y ahora se hizo patente en un corte de ruta al ingreso a esta localidad. Ahí se apostaron a la altura de Misión El Cebilar, sobre la RN 34.
“Desde ayer los vecinos se apostaron en el lugar con la modalidad de liberar el paso a media calzada cada cierto tiempo para descomprimir el tránsito”, señalan desde Nuevo Diario. Alrededor del mediodía se dispuso el corte total. El pedido de renuncia a Prado se mantiene.
Hay además un petitorio de 12 puntos, que presentaron ante Mesa de Entradas de la Municipalidad. Prado no da señales de vida. Hay quienes aseguran estaría en Salta Capital. Otros dicen que se reuniría hoy con los vecinos para dar las explicaciones requeridas.