Si el motociclista no entrega la rueda, le secuestran el vehículo. El intendente Gustavo Solís busca garantizar el aislamiento y evitar accidentes con heridos que ocupen camas hospitalarias. En la ciudad de 35 mil habitantes hay 12 mil motos.
El jefe comunal de la ciudad del sur de la provincia encontró una manera salomónica para sancionar a los motociclistas que al transitar por las calles rompen la cuarentena: “Se lo invita al vecino a dejar la rueda o se le retiene el vehículo”, explicó Gustavo Solís quien reconoció por FM Aries que la medida puede parecer “extraña”, pero resolvieron aplicarla porque “todavía hay gente no toma consciencia” de la pandemia y de cómo la cuarentena busca evitar el contagio.
El intendente de la Ciudad termal manifestó que la resolución apunta a motocicletas porque son las que mayormente incumplen las normas y en el municipio de 35 mil habitantes, hay 12 mil de este tipo de vehículos.Agregó que la sanción se toma también para evitar los siniestros viales y que las víctimas ocupen camas y ambulancias en el contexto de una crisis sanitaria que se vive en la provincia, escenario en el que se debe eficientizar los recursos. “El municipio no puede ser su niñero”, expresó Solís respecto a la sanción y su objetivo.
Consideró que no se trata de una medida injusta, porque lo injusto es que el sistema estatal tenga que movilizar una ambulancia para una víctima de siniestro vial, gastar 30 mil a 40 mil por “el imbécil que no usa casco” y se lo tenga que enviar a Salta a ocupar una cama en un hospital.