Luis Arce aseguró que la producción cayó hasta «tocar fondo».
El presidente de Bolivia, Luis Arce, aseguró que la producción de gas en ese país cayó hasta «tocar fondo». Bolivia exporta a Brasil 14 millones de metros cúbicos día (mmcd) y a Argentina entre 16 a 18 mmcd., principalmente a las provincias del NOA y NEA.
El martes, Arce lanzó la primera señal de alerta: «Hay una declinación de la producción (…) que lamentablemente ha ido cayendo hasta tocar fondo». El mandatario, en el poder desde 2020, reconoció la falta de inversión en el sector. «Hemos perdido muchas reservas de gas durante todo este tiempo. No se han repuesto esas reservas de gas y el país, por lo tanto, no tiene la capacidad de producir más gas», afirmó durante un acto público en la ciudad de Oruro.
La producción de gas cayó de 59 millones de metros cúbicos diarios (mmcd) en 2014 a 37 mmcd actualmente, según el presidente de YPFB. Además de abastecer al mercado interno, el gas boliviano se vende a los mercados argentino y brasileño. A Brasil exporta 14 millones de metros cúbicos día (mmcd) y a Argentina entre 16 a 18 mmcd. Esto último era clave para cubrir el abastecimiento de la región norte del país.
No obstante, el Estado argentino planea dejar de depender del suministro boliviano a partir de 2025. De allí la importancia de la ya licitada obra «reversal» del gasoducto Norte que utilizará el gasoducto Juana Azurduy – nace en Bolivia e ingresa a nuestro país a través del Salta para atravesar varias provincias del NOA y NEA – para llevar al norte desde Vaca Muerta – e incluso a Brasil – lo que antes llegaba de Bolivia.
En ese marco, los medios nacionales informan que el gobierno argentino negocia con el país andino para que garanticen un cupo de entre 4 y 6 millones de metros cúbicos diarios hasta mayo del año 2024. El objetivo es que la interrupción de las importaciones de gas empalme con la inauguración de la obra.
