Encuestas revelan que el 11% de las pequeñas y medianas empresas planea reducir sus planteles en los próximos 6 meses, casi el doble que hace un año.
Imposibilitadas de trasladar los aumentos de costos a los precios por la caída en la demanda, un número creciente de pymes se vería forzado a recortar personal para mejorar su competitividad en los próximos meses, según revelan encuestas recientes.
Un sondeo de IAE Business School que difundió el sitio web Ámbito, entre 268 firmas el 11% prevé reducir dotaciones en el corto plazo, mientras que otro 29% respondió «quizás». Esto contrasta con similares mediciones del primer semestre del 2022 y 2021, cuando los porcentajes eran del 6%.
La proporción de empresas que asegura que no ajustará su plantilla cayó del 76% en enero-junio del año pasado al 60% actualmente.
Marina Dal Poggetto, directora de Eco Go, explicó que tras los fuertes aumentos de precios posteriores a la devaluación de diciembre, se produjo una fuerte caída en las ventas. Ante esto, las compañías adoptaron una actitud cautelosa, pero los crecientes costos empiezan a impactarlas.
La economista anticipó que la recesión en curso traerá aparejado un fuerte incremento del desempleo. Explicó además que tras la pandemia, con una demanda insatisfecha, las empresas vendían todo su output casi al precio que quisieran. Pero eso cambió: ahora, con una oferta limitada, deben recortar costos. Y a corto plazo, eso se logra reduciendo personal.