Centros de estudiantes y agrupaciones se concentraron frente a la Autoridad Metropolitana de Transporte para pedir que no se limiten los viajes con el pase libre.
La Plaza Alvarado fue escenario ayer de una nutrida movilización estudiantil en rechazo a las nuevas restricciones impuestas por la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) al uso del pase gratuito universitario. Convocados por los centros de estudiantes y agrupaciones de la Universidad Nacional de Salta (UNSa), más de 500 alumnos se concentraron al mediodía para luego marchar hacia las oficinas del organismo regulador.
Los estudiantes reclaman que se levante el cupo mensual de viajes y el horario acotado que fijó la AMT para hacer uso del beneficio. A partir de marzo, el pase solo podrá utilizarse de lunes a viernes entre las 6 y las 0 horas, con un tope de 70 boletos por mes para universitarios y 30 para ingresantes.
«Con 30 boletos no está contemplada ni la asistencia a los cursos de ingreso», apuntó Lautaro, integrante de la marcha. Explicó a la prensa que muchas actividades académicas obligatorias para regularizar materias implican traslados extra a la facultad.
Tres referentes fueron recibidos por el presidente de la AMT, Marcelo Ferraris, quien confirmó que no habrá marcha atrás con las restricciones. «No pudo mostrar ningún dato certero de uso indebido. No tienen estudios, hablan sin fundamentos», denunciaron los manifestantes.
El pase libre estudiantil permite viajar gratis en colectivo, un beneficio clave frente al último incremento del boleto a $290 que desde el lunes trepará hasta los $490.
Los estudiantes advirtieron que seguirán «movilizados en defensa del derecho a la educación y por dar continuidad a nuestras trayectorias académicas». Analizan realizar cortes de calle y más protestas si no hay respuestas.
