Durante la jornada, declararon varios expertos del CIF y un testigo civil. Se detallaron pruebas clave, como rastros de sangre y evidencia de allanamiento. Los imputados enfrentan cargos por homicidio, encubrimiento y negligencia en el deber de funcionario público.
En el Salón de Grandes Juicios se desarrolló una relevante jornada en el marco del juicio por el homicidio de Rosa del Milagro Sulca, maestra asesinada en su domicilio de Villa Mitre el 28 de abril de 2020. La audiencia contó con la participación de cinco profesionales del CIF (Centro de Investigaciones Forenses), incluyendo un licenciado en criminalística, una bioquímica, un ingeniero y un experto en papiloscopía. Además, compareció un testigo civil. El tribunal colegiado integrado por los jueces de la Sala VI presidió el proceso.
Durante las declaraciones, según informó el Ministerio Público Fiscal de Salta, el licenciado en Criminalística brindó detalles clave sobre la inspección ocular realizada en el domicilio de la víctima. Se encontraron evidencias de allanamiento, como un picaporte roto, roturas en la tela mosquera de una ventana trasera y en la puerta principal. Además, se hallaron rastros de sangre en paredes, piso, muebles y un cuchillo con la hoja doblada en la mesada de la cocina.
El perito también destacó la presencia de un monedero y un bolso vacíos, así como mobiliario con las puertas abiertas, sugiriendo un posible robo anterior. La víctima fue encontrada sin vida en su habitación, tendida boca abajo sobre la cama, sosteniendo algunos pelos en su mano izquierda.
Los imputados en el caso enfrentan distintos cargos, desde homicidio calificado por alevosía y criminis causae, hasta encubrimiento agravado y negligencia en el cumplimiento de deberes de funcionario público. Dos de los acusados se desempeñaban en el Sistema de Emergencia 911, específicamente en el Centro de Coordinación Operativa y Demanda Ciudadana.
La jornada en el juicio permitió exponer pruebas fundamentales que ayudarán a esclarecer los hechos y determinar la responsabilidad de cada acusado. El proceso continúa con la participación del Ministerio Público, la parte querellante y los defensores de los imputados.