La madre del asaltante tiroteado por la espalda por el policía Luis Chocobar vive en el interior de Salta y declaró a través de una videoconferencia. “No pido que lo maten a Chocobar como mató a mi hijo, pido que se lo juzgue”, declaró.
El escenario fue bien porteño, pero los protagonistas fueron todos salteños: Juan Pablo Kukoc asaltó el 8 de diciembre del 2017 al turista estadounidense Frank Wolek (60) que caminaba por La Boca y recibió varias puñaladas. Tras el ataque, Kukoc y su cómplice escaparon, pero el primero fue atrapado por dos testigos. Entretanto, hizo su aparición otro salteño: Luis Chocobar, policía de Avellaneda. Cuando llegó al lugar, Kukoc logró zafar y escapar. Tras una breve persecución, Chocobar disparó al menos siete veces. Dos balas impactaron en su cuerpo, una en el fémur y otra en la espalda luego de rebotar en el piso.
A casi tres años exactos del suceso, arrancó el juicio y ayer fue el turno de Ivonne Kukoc. Lo hizo desde la sede de la Defensoría General de la Nación en la capital salteña frente a los jueces del Tribunal Oral de Menores 2, en una nueva audiencia del debate que se lleva adelante para determinar la responsabilidad del uniformado. La mujer señaló que «Chocobar tiene la oportunidad de ser juzgado, oportunidad que no tuvo mi hijo que fue asesinado por la espalda». En el mismo juicio también es juzgado el joven que participó en el robo junto a Kukoc -en ese momento era menor de 18 años y por ese motivo se realiza ante un tribunal de menores y a puertas cerradas-.
Medios nacionales como Página 12 publicaron en su edición de hoy que el testimonio de la madre fue «muy duro, muy sentido y doloroso. Declaró durante alrededor de una hora, y debió ser interrumpido durante algunos minutos» a pedido de la mujer. La declaración de Ivonne se centró en dos partes. En la primera, la fiscal Pernas, le pidió que recordara el día del hecho y le realizó preguntas relativas al joven acusado; mientras su representante le pidió que describiera a su hijo. Ivonne dijo que era «un chico alegre, que ayudaba» y no negó que «había tenido problemas con el alcohol y el antecedente del robo de un celular». “Nunca lo victimicé, nunca dije que estaba bien lo que hizo, siempre recé para que el turista sobreviva». Y afirmó que «disparar por la espalda no es para nada cumplir con el deber de un policía. No pido que lo maten a Chocobar como mató a mi hijo, pido que se lo juzgue y que decidan si se merece un castigo. Quiero que los jueces me expliquen si matar por la espalda es el trabajo de un policía».
Tal como ocurrió en las audiencias anteriores, Chocobar concurrió de manera presencial a la audiencia, mientras que en la puerta de los tribunales de Comodoro Py se concentraron grupos que repudian el «gatillo fácil» y un grupo en apoyo al policía acusado. Chocobar no declaró hasta el momento en debate oral, pero durante el proceso declaró en dos oportunidades y en ambas se contradijo y contradijo la versión de su defensa. La primera vez sostuvo que lo vio darse vuelta y se asustó y le disparó. La segunda dijo, en cambio, que el joven se dio vuelta y se le vino encima y por ese motivo disparó. Para colmo, ambas declaraciones contradijeron las imágenes captadas por una cámara de seguridad, en la que se ve que los disparos son hechos mientras Kukoc le daba la espalda.