Al equipo uruguayo le costó más de la cuenta pero venció a Egipto por 1 a 0 con un gol sobre la hora. La selección del argentino Héctor Cúper no contó con su máxima figura, Mohamed Salah.
Uruguay y Egipto abrieron la segunda jornada mundialista con un entretenido encuentro que, aunque no tuvo goles hasta el último minuto, se jugó de manera intensa. Es que si bien la celeste tuvo las opciones más claras para abrir el marcador, los de Cúper sorprendieron con iniciativa y buen juego aun sin haber podido contar con su máxima figura, Mohamed Salah, quien se recupera de la lesión sufrida en la última final de Champions.
Egipto se mostró firme defensivamente, con buen manejo de la pelota, pero claramente sintió la ausencia del delantero del Liverpool ya que le costó concretar en tres cuartos de cancha hacia adelante. Sin embargo fue la selección uruguaya quien, con el peso propio de la categoría de sus jugadores, dominó el partido y tuvo las chances más claras para quebrar el cero, situación que en parte se negaba debido a la buena resistencia del arquero egipcio El Shenawy. Resistencia que se vio vencida recién en el minuto 89 cuando, tras un tiro libre desde la derecha, el defensor José María Giménez se elevó y convirtió de cabeza el primer y único tanto del partido.
En la próxima fecha del grupo Uruguay se medirá con la frágil Arabia Saudita en un partido clave para sellar definitivamente su clasificación a octavos; en tanto Egipto hará lo propio contra Rusia, el anfitrión del certamen que ya ganó su primer encuentro.
El resumen:
El gol desde distintos puntos de la tribuna. Imperdible: