El gobernador socialista santafesino fue uno de los primeros en mostrarse el año pasado con Urtubey, aunque ahora descree de que el espacio que el salteño ayudó a fundar tenga chances de cumplir el objetivo propuesto: llegar a una segunda vuelta.
Una larga entrevista concedió el mandatario santafesino al diario Ámbito Financiero. Allí habló de las expectativas que genera en su provincia el fallo de la Corte Suprema de Justicia en favor de la provincia de San Luis que junto a Santa Fe exigieron judicialmente a la nación la devolución de coparticipación. En el caso de Santa Fe, Lifschitz precisó que si se repitiera con su provincia el criterio que la Corte empleó con San Luis, La Casa Rosada debería devolver a Santa Fe alrededor de $80.000 millones.
Pero el gobernador también habló de política y de elecciones y en tanto fue uno de los primeros en conversar con referentes del peronismo federal como el gobernador salteño Urtubey; no sorprendió que le consultaran cómo avanza la integración del socialismo a ese espacio nacional. La respuesta no es auspiciante para los militantes del Alternativa Federal que desean la incorporación del socialismo a esa empresa electoral.
“No tenemos vocación de integrarnos a una disputa del peronismo. Sí estamos trabajando con otros dirigentes en un acuerdo más amplio que pueda integrar a otros sectores políticos. Quizás incluya sectores que hoy están representados en Alternativa Federal. La idea es constituir una opción con más chances de llegar a una segunda vuelta. Los números de cualquier encuesta indican que hoy ningún candidato del peronismo federal tiene chances de llegar a una segunda vuelta. En todos los sondeos aparecen el presidente Macri y Cristina de Kirchner liderando la intención de voto. Un posible balotaje se daría entre ellos. La posibilidad de constituir una propuesta alternativa que rompa la polarización para colarse en una segunda vuelta necesariamente debe tener una base más amplia que la del peronismo federal. En eso estamos trabajando”.
¿Es posible romper la polarización?
“La polarización se reprodujo en 2015 y en 2017. Pero hoy el escenario está cambiando. Hay un sector cada vez más grande que no se siente representado por Cristina ni por Macri. Si hoy surgiera una propuesta confiable, que genere expectativas de gobernabilidad -o sea, no un rejunte-, que tenga una base de sustento amplia, que represente distintas vertientes, tiene serias chances de romper la polarización. Ahora… si logramos ese gran acuerdo entre dirigentes, que los que ya están lanzados resignen esas posiciones en pos de un proyecto, y que luego eso se represente en una fórmula, estaríamos cerca del éxito. Hoy parece difícil, pero no imposible. Al 40% de los argentinos no le convence ni Cristina ni Macri. Y quizás tengan que elegir entre uno de ellos porque no les quede más remedio.