Dirigido a niñas y niños de 5 a 10 años, las organizadoras buscan aprovechar la revalorización de la imagen de la bruja en la actualidad. Según las responsables, el objetivo es llegar a grupos sociales sin contacto con el discurso feminista.
La actividad es organizada por LATFEM y se llevará a cabo el 9 de febrero, en Ciudad Cultural Konex, Capital Federal. El hilo conductor de esta iniciativa de la Escuela de Brujas Feministas es la alianza entre el mundo de las brujas -el tarot, los amuletos, los hechizos, la mitología, los rituales- con el arte, la creatividad y el feminismo popular.
La idea se gestó hace un año y medio de la mano de la artista plástica, performer y música Fátima Pecci Carou. El disparador fue armar una serie de talleres para adolescentes, niñas y niños: “Todas estábamos atravesadas de alguna forma por la figura de la bruja, que es un arquetipo esencial para la historia de las mujeres y las disidencias, y para la teoría feminista en general. Así que muy pronto se delinearon tres ejes: brujas, creatividad y feminismo. Esos fueron los conceptos clave sobre los que armamos todas las actividades de la Escuela”, explicó a Clarín Lu Martínez, escritora, guionista y tarotista de la Escuela de Brujas Feministas.
En el taller aprenden a realizar un libro de hechizos tipo fanzine, crear autorretratos a partir de los arcanos del tarot y las figuras míticas con los elementos que sienten parte de sus virtudes, y a pronunciar conjuros poéticos para derribar las violencias machistas desde el juego con las palabras. Las actividades están orientadas a trabajar, desde lo lúdico, los conceptos de empoderamiento y feminismo.
Según lo que cuentan las responsables, participar en el Camping y hacerlo en el Konex tiene el objetivo de llegar a grupos sociales que no están en contacto con el discurso feminista. La intención del encuentro es sumar más personas en la participación política y generar un cambio en la mirada cultural y desde la perspectiva de género.
El Camping Feminista de LATFEM está destinado al público general, pero pone el foco en las y los feministas en formación que quieren tener un lugar de encuentro. La idea es debatir y crear redes de apoyo y reflexión con interlocutores que pueden llegar a esas generaciones.