Recientemente el funcionario provincial señaló que la administración de Gustavo Sáenz enfrentó un inicio de año complejo por la falta de presupuesto nacional y el estancamiento de obras a nivel federal. No obstante, destacó que Salta continuó con proyectos previstos desde el principio de 2024, asumiendo incluso tareas que el Gobierno nacional abandonó, como la construcción de viviendas. Así también, Camacho aseguró que esto fue posible gracias a la decisión del gobernador de priorizar los recursos provinciales.
Luego explicó que para 2025, se destinará un 12,8% del presupuesto provincial a 690 obras, equivalentes a $271.638 millones, cifra que asciende a $623 mil millones al incluir financiamiento externo. Este enfoque, explicó Camacho, busca recuperar años de desinversión en infraestructura y mantener un plan de trabajo equilibrado y participativo. Además subrayó que esta estrategia asegura previsibilidad y control por parte de los legisladores y la ciudadanía.
El ministro también destacó proyectos clave como hospitales en Güemes y el Milagro, la intervención en más de 140 escuelas y mejoras en seguridad. Para Camacho, la visión de Sáenz de transformar la inversión en infraestructura en una política de Estado es evidente en el crecimiento presupuestario destinado al área, que pasó de un 3,5% en 2019 al actual 12,8%.