La desregularización de las tarifas de gas decretada por el Gobierno Nacional amenaza la continuidad del programa de asistencia a familias salteñas. Las autoridades provinciales expresan su preocupación por el impacto en los hogares vulnerables.
El secretario de Participación Ciudadana y Relaciones con la Comunidad, Iván Mizzau, advirtió que el programa «Garrafa Social» podría llegar a su fin debido a la desregularización de las tarifas de gas anunciada por el Gobierno Nacional. Según explicó en una entrevista radial, esta medida provocaría un aumento significativo en el costo de las garrafas, volviéndolas prácticamente inaccesibles para gran parte de la población.
Mizzau señaló que, por el momento, el programa se mantiene vigente en la provincia, con alrededor de 40 puntos de distribución en la capital y 100 en el resto del territorio. No obstante, las reuniones con las empresas de gas y la información extraoficial proveniente de fuentes nacionales anticipan su inminente cancelación.
Ante la desregularización de las tarifas, el precio de una garrafa de 10 kilogramos podría alcanzar entre 20 mil y 25 mil pesos. Esta situación representaría un golpe devastador para las familias vulnerables, quienes deberían destinar alrededor de 50 mil pesos mensuales solo para adquirir las dos garrafas necesarias para cubrir sus necesidades energéticas básicas.
En la actualidad, el programa «Garrafa Social» distribuye entre 4 mil y 6 mil garrafas semanales en toda la provincia, beneficiando a numerosos hogares. No obstante, las autoridades temen que esta ayuda se vea interrumpida a partir del mes de julio, dejando a miles de familias en una situación crítica.