Una de las directoras del organismo salteño apuntó a que medidas como esta intentan desviar la atención sobre temas más acuciantes, como los recortes en diversas áreas o el empobrecimiento generalizado.
En una entrevista con el programa Cuarto Oscuro, que se emite por radio La Plaza FM 94.9, Ana Pérez Declercq, directora del Observatorio de Violencia contra las Mujeres, criticó la reciente resolución del Gobierno nacional que prohíbe el uso del lenguaje inclusivo en las dependencias de la administración pública.
«Uno puede prohibir que en los instrumentos oficiales se use determinado tipo de lenguaje. Pero el lenguaje es algo vivo que se va a seguir usando», afirmó Pérez Declercq. Luego consideró que la prohibición muestra «un desconocimiento o una negación de leyes» como la ley de identidad de género, que obliga a los funcionarios a dirigirse a las personas no binarias con pronombres neutros.
Consultada sobre si el Gobierno está atacando los logros del movimiento feminista y de la diversidad, Pérez Declercq señaló que ahora es necesario concentrarse en «cosas más de fondo que tienen que ver con intereses económicos», en referencia a la llamada «ley ómnibus» que estuvo hasta hace poco en debate. También apuntó contra el desfinanciamiento y desmantelamiento de áreas y programas de género, y el cierre de organismos como el INADI.
«Lo que acompaña eso, que tiene que ver con, por ahí, pautas más conservadoras, pienso que en realidad contradice su idea de libertad, ¿no? Porque si fuese esto de que cada quien es libre, bueno, otra sería la historia. Pero sí, hay un ataque, creo que no solamente contra el colectivo feminista, de la diversidad, sino que también hay un ataque a la clase media, a la clase trabajadora», analizó.
Por otra parte, expresó: «Hoy vas a un centro de salud y no hay medicamentos. Eso habla de cómo están pensando en nuestra sociedad». En ese sentido, Pérez Declercq no dudó en señalar que discusiones como las que plantea el gobierno de Milei (tal el caso del enfrentamiento con Lali Espósito) lo único que buscan es desviar la atención de la población hacia temas de menor relevancia para que no se discuta lo más importante, que es la situación de pobreza a la que nos están llevando con sus decisiones.