El Gobierno dispuso el cierre temporal del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales. Sus empleados serán licenciados hasta una reestructuración incierta.
El presidente Javier Milei ordenó el cierre preventivo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA). La medida, oficializada este lunes en el Boletín Oficial, implica licenciar a todos los trabajadores hasta que culmine una reorganización interna cuya fecha límite no fue especificada. La decisión apunta a reducir el presupuesto y operatividad del organismo.
Según el nuevo organigrama, sólo cuatro gerencias continuarán funcionando: General, Asuntos Legales, Administración y Finanzas, y Políticas Públicas. Se eliminarán las áreas de Fomento, Asuntos Institucionales, Exhibición y Audiencias, y Fiscalización Audiovisual.
En el marco de la Ley Ómnibus impulsada por el Ejecutivo, se prevé modificar el financiamiento del INCAA y suspender contrataciones, apoyos institucionales y pago de horas extras. Los gremios advierten que las salas de cine dependientes no operarían comercialmente, aunque las funciones del Festival Bafici 2024 en el cine Gaumont estarían garantizadas.
Al frente del INCAA quedó designado Carlos Pirovano, un economista sin trayectoria en el sector audiovisual. La estrategia oficial parece emular el cierre de la agencia Télam bajo el argumento de una revisión que se extiende sin plazos definidos.
