Pablo López buscaba cerrar su escandaloso accionar escapando por la ventana mediante su renuncia, pero sus pares quieren destituirlo. Mañana miércoles habrá sesión especial.
Hay acuerdo en todos los bloques políticos del Concejo Deliberante de Salta. Nadie quiere aceptarle la renuncia al edil denunciado por violencia de género, económica y sexual; todos desean que impulsar el enjuiciamiento político al edil libertario que retenía parte del sueldo a una trabajadora del concejo a quien también le pedía favores sexuales para amortizar una deuda.
En ese marco, los ediles acordaron realizar una sesión especial durante la jornada de mañana para tratar el asunto. Allí se rechazara la renuncia presentada por el Pablo López y se buscara la forma de impulsar el juicio político que la semana pasada propuso el edil Gustavo Farquharson, postura a la que se fueron sumando la mayoría de los concejales.
“Creo que el cuerpo no debe aceptarle la renuncia. Mi postura es que corresponde un juicio político. Un mecanismo que contempla la Constitución Nacional en su artículo 53, también la Carta Municipal de la ciudad de Salta y el reglamento interno del Concejo Deliberante. Acá hay arbitrariedad en el ejercicio de las funciones del concejal, la ejerció contra una trabajadora del Concejo y hay elementos que dan cuenta de una inmoralidad que desprestigian al cargo que ostenta. Creo que el cuerpo debe activar los mecanismos previstos para iniciar un Juicio Político y luego remover al concejal que incurrió en las causales previstas”, había manifestado Farquharson el pasado viernes a este medio.


