En algunos casos podrían llegar a pagar hasta 6 mil pesos.
Las calles de convivencia en el centro salteño son fáciles de reconocer, son las que forman parte del denominado Corredor de la Fe y algunas otras adicionales también el microcentro capitalino. Estas calles, supuestamente, priorizan el paso de peatones y ciclistas, por ello requieren restricciones para automóviles.
Y para hacer cumplir esas restricciones los concejales aprobaron la Ordenanza que regula la circulación de vehículos en dichas calles. En el proyecto que fue promulgado se establecen límites de velocidad (20 km/h), se prohíbe el estacionamiento sobre ambas aceras y las multas rondarán entre las 100 y 200 unidades tributarias. El valor de cada una fue fijado en $31,43, unos $6.286.
Quedó establecido también que por las «calles de convivencia» sólo podrán circular vehículos de bajo peso, cuyo máximo no supere las 4,6 toneladas.