La noticia de que podrían terminar con los tratamientos encendió alarmas. El Ministerio de Salud aclaró que no quitarán atención.
Los centros privados de diálisis de Salta reclaman el pago de una deuda millonaria que el Gobierno Nacional mantiene con los establecimientos. Por ello, advirtieron que podrían no recibir a nuevos pacientes con insuficiencia renal crónica que dependan del programa federal Incluir Salud.
La noticia generó un clima de incertidumbre entre los pacientes del ex Profe. Sin embargo, desde el Ministerio de Salud provincial aseguraron que se garantizará el tratamiento de diálisis a quienes queden excluidos por la decisión.
“La Provincia tiene asegurado contrato con los prestadores privados, para los casos en los que no se cuente con servicio público”, dijo el médico nefrólogo Tomás Gilabert a El Tribuno, quien es el supervisor de Salud Renal de la cartera local.
En salta hay aproximadamente 270 personas de Incluir Salud en tratamiento por la enfermedad crónica renal. Los pacientes deben hacerse hemodiálisis o diálisis peritoneal hasta que puedan ser transplantados. El hospital público Oñativa y los nosocomios del interior que tienen las máquinas dializadotas son los lugares que atienden dichos tratamientos.