El objetivo de bajar el déficit no incluye recortes en subsidios a energía y transporte, programas de educación, obra pública e incluso a jubilados.
La cartera que comanda Nicolás Dujovne puso sobre la mesa una serie de opciones para que la baja del déficit sea un “esfuerzo compartido” entre Nación y Provincias. Si bien no hay números concretos, la invitación está y serán los responsables de las economías del interior quienes deban llevar una contrapropuesta.
De esta manera, Nación plantea que los estados renuncien 5% de la coparticipación del IVA, fondos que son destinados para financiar la ANSES. Además, según Clarín, en Hacienda consideran revisar la Reforma Previsional para que la actualización de los haberes para jubilados no quede indexada a la inflación.
Por su parte, el gobierno de Mauricio Macri también dispuso la pérdida del Fondo Federal Solidario el cual proviene de las retenciones a las exportaciones de soja y que están destinados a la obra pública.
Otro de los puntos de recorte son los subsidios a la energía y al transporte: las provincias serán las encargadas de subir o no las tarifas. Asimismo deberán optar por hacerse cargo de “los programas de salud que hoy paga Nación, programas sociales y del Fondo del Incentivo Docente”, detalla El Cronista.
El ajuste está sobre la mesa y recae sobre los fondos públicos y nunca los privados. Son los mandatarios provinciales quienes deberán aceptar o no tamaña reducción de inversión en territorio, lo cual conlleva un costo político difícil de dimensionar aún.
