El gobernador se refirió a las polémicas de los últimos días que involucran a ambos legisladores.
El gobernador Gustavo Sáenz habló este viernes de las polémicas provocadas alrededor de los legisladores Héctor Chibán y Sergio Leavy y sus comportamientos tras haber estado en contacto con personas que podrían haber contraído coronavirus.
Con un tono amable y conciliador, Sáenz justificó el viaje de Leavy y se desentendió de su comportamiento posterior. Además, dijo entender a Chibán pero consideró que tenía que pedir perdón.
«Yo vengo reclamando desde el primer momento que no es momento de hacer política, ni menos política oportunista», dijo el mandatario durante una entrevista realizada esta mañana en FM Aries.
Como un padre
Sáenz consideró que Chibán se comportó más como un padre que como un legislador cuando fue a buscar a su hijo al ex peaje Aunor. Chibán llevó a su casa al joven en su vehículo particular, algo que fue cuestionado por un sector del oficialismo y Diputados. Se impulsó una investigación y hubo críticas muy duras del presidente de la Cámara, Esteban Amat. Además, Epidemiología recomendó que Chibán entrara en cuarentena por haber establecido contacto con su hijo apenas arribó desde Buenos Aires.
«Mi viejo me decía ponete en los zapatos del otro antes de juzgar a nadie, y la verdad que cuando uno es tata no sabe cómo actúa en ese momento. A veces los impulsos te llevan. Qué sé yo cómo hubiese actuado yo», dijo Sáenz y luego habló de la angustia de la familia de Chibán por el caso que derivó en la polémica. Sin cambiar el tono amable, el gobernador se encargó de criticar al radical: «Lo que sí creo es que en la vida, cuando uno comete errores, no es debilidad reconocerlo. Pedir perdón o decir ‘me equivoqué’ muchas veces demuestra grandeza y humildad, y creo que eso es lo que debería hacer el diputado, y no tratar de culpar a otros. Todos nos equivocamos y en este sentido creo que el impulso de padre ha sido mucho más fuerte que su cargo y le podría pasar a cualquiera».
Desconozco
Luego, el gobernador opinó sobre la polémica alrededor de Sergio Leavy, quien regresó hace ocho días de Buenos Aires y no entró en cuarentena sino que circuló por distintos edificios públicos y entró en contacto con varias personas en la ciudad.
«Nobleza obliga, él pidió autorización al COE para ir con todas las medidas de seguridad e higiene, para poder acudir a una sesión que no podía hacerse por videoconferencia», dijo Sáenz al relatar los procedimientos de Leavy para ir a Buenos Aires.
Sin embargo, decidió no involucrarse en lo que generó el escándalo. «Desconozco los movimientos del senador», dijo Sáenz al ser consultado por la falta de cuarentena de Leavy una vez que regresó a la provincia.
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