El periodista Edi Zunino -Radio Perfil- se detuvo en la muerte del prócer salteño. Retomando los dichos de un médico forense, echó tierra sobre la versión del unitario General Paz, quien además escribió otras injurias sobre Güemes, como la que dice que era gangoso.
Con el título «Autopsia de Güemes», el periodista de Radio Perfil -y muchos años parte del staff de la Revista Noticias- Edi Zunino escribió una suerte de editorial en la que se dedicó a corregir algunos dichos sobre la salud y muerte de Martín Miguel de Güemes.
Sobre el prócer salteño se dijo mucho y escribió otro tanto, por ello no faltan las versiones difamatorias que lo tildan de «patai’lana» o quienes todavía repiten que Güemes tenía un problema en el habla. Precisamente estas dos versiones fueron difundidas por el General José María Paz, militar unitario que se encargó de difamar al salteño en tanto escrito pudo. Así lo muestra la nota de Zunino.
No era gangoso
«La versión de que Güemes era gangoso por carencia de úvula pertenece al General Paz, que la dejó escrita en sus memorias», señala el periodista de Perfil. A modo de contraste toma la voz de un médico forense: Pedro Antonio Álvarez. Se trata del primer médico legista del Poder Judicial en Salta y un apasionado de la gesta de la Independencia y de la vida y la obra del caudillo salteño.
Para Álvarez no existen pruebas fehacientes de que Güemes tuviera algún problema en el habla. Incluso se pregunta si «un militar de carrera podría haber sorteado los exámenes de ingreso y de ascensos en los Ejércitos del Rey y el Patriota, siendo portador de algunas de las malformaciones nombradas u otras patologías». Entonces cita a los documentos de los Servicios Militares de Güemes desde su ingreso como Cadete en Salta, hasta su primer traslado a Buenos Aires (1799-1805) y en los Servicios Militares prestados por en la Capital del Virreinato (1805-1808), donde nada se dice de ese problema.
No tenía hemofilia
Por otro lado, el forense Álvarez desestimó que Güemes fuera hemofílico; un rumo también difundido por el unitario Paz, cuando en sus memorias se refiere a una «depravación humoral del físico de Güemes» por la cual «cualquier herida que recibiese le sería mortal»… Algo que en el caso de Güemes debería descartarse si se tiene que cuenta que la hemofilia es hereditaria y en el caso del salteño no había registro en su familia; además de que, según señala Álvarez, el historiador Bernardo Frías «describe una ligera cicatriz en un párpado de Güemes de cuando niño, por una caída del caballo. Sobre todo, en aquella época, una herida así habría sido mortal para un hemofílico».
Murió por infección
Otra de las desmitificaciones que refirió Álvarez apunta a la razón de la muerte de Güemes. Muchos repiten que falleció a causa de la hemofilia tras recibir un disparo en el glúteo. Según el galeno que retoma Zunino, esta será otra patraña. Si Guemes hubiese padecido esa enfermedad su deceso se habría dado a escasas horas de recibir la herida y no en 10 días, como sucedió.
Lo que mató a Gúemes, según Álvarez, fue una infección severa a causa del tratamiento precario que le dieron. Según el certificado de defunción, se produjo una “gangrena” pelviana producida por “tétanos” a partir de la herida infectada.
«Con la finalidad de contribuir a una mejor interpretación histórica y a la luz de los avances médicos, se puede deducir que la patología factible que llevó a la muerte del héroe, ha sido una septicemia», indica el médico Álvarez.
