lunes 13 de enero de 2025
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NO significa siempre NO | Campaña por el consentimiento en las relaciones sexuales

El Observatorio de Violencia contra la Mujer lanzó esta campaña que busca visibilizar situaciones cotidianas de violencia sexual para promover e instalar el concepto de consentimiento.

En 2017 salió el último informe del Ministerio de Seguridad de la Nación sobre Estadísticas Criminales. En él se puede leer que se registraron casi cuatro mil denuncias por abuso sexual con acceso carnal. Hubo un incremento porcentual de seis puntos respecto al año anterior.

Hay un promedio de 11 violaciones diarias en Argentina. La provincia de Salta está en segundo lugar en cuanto a cantidad: 290 violaciones al año. Casi una por día. Estas son las estadísticas de las policías provinciales y federales.

De todas maneras estos números son aproximativos, porque muchos casos quedan sin denunciar. Por ejemplo según el Informe 2018 del Observatorio, de 97 casos de violencia sexual, sólo 17 fueron denunciados.

Este es el principal motivo para que lancen esta campaña. En ella podemos observar 4 escenas que pueden ser muy familiares para las y los salteños: Carnaval, una salida al río, una invitación a tomar mate y una reunión de amigos. Todas ellas con un denominador común, los diversos modos que adopta la violencia sexual, desde compartir una fotografía sin autorización hasta la violación de una personas en estado de ebriedad.

Según indican desde el Observatorio, otro motivo es “el abordaje mediático realizado sobre los últimos casos de violencia sexual”: Los medios suelen deslegitimar la palabra de las mujeres, perpetuar estereotipos, sexualizar cuerpos, culpabilizar a las víctimas, y otras acciones que refuerzan la cultura de la violación.

Lo dice la ley

El Artículo 5 de la Ley 26.485, de Protección Integral a las Mujeres, establece explícitamente que la “violencia sexual” es una forma de violencia contra la mujer, e implica cualquier violación, con o sin penetración genital, del derecho de la mujer a decidir voluntariamente su vida sexual y reproductiva por medio de amenazas, coacción, uso de la fuerza o intimidación, incluida la violación dentro del matrimonio o en otro tipo de relación, donde la convivencia esté presente o no, así como la prostitución forzada, la explotación, la esclavitud, el acoso, el abuso sexual y la trata de mujeres.

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