Tujuay Gea es médica y fue compañera de lucha de la histórica referenta fallecida en 2022. Hoy habló del panorama ante el triunfo de Milei, el proyecto de Victoria Villarruel que amenaza a las comunidades y de lo que haría su madre ante ello.
Octorina Zamora no requiere mucha presentación ante los salteños. Alcanza con decir que fue una de las más reconocidas representantes de las comunidades de la provincia, luchadora incansable de las causas indígenas y alguien que hasta sus últimos días estuvo diseñando estrategias y proyectos para beneficiar a su pueblo.
Tujuay Gea Zamora es su hija y cuenta con sus propios blasones: es la primera médica wichí graduada. Lo hizo en Cuba y desde allí regresó a su suelo natal para trabajar con las comunidades de las que forma parte. Hoy fue entrevistada por el programa CUARTO OSCURO que se emite por FM La Cuerda (104.5). El tema abordado se adivina: el triunfo de Javier Milei y las perspectivas que ello genera para los pueblos originarios.
Sobre lo primero dijo que “hay una actitud de bloquear el horizonte y creo que los pueblos indígenas conocen muy bien qué es lo que está planeado para nuestros pueblos. Por eso la lucha es constante. No esperamos nada nuevo, sí tal vez una mayor contundencia y aceleración en la avanzada que viene desde hace siglos – desde el inicio de la construcción del Estado – sobre nuestros pueblos. La verdad que el panorama que viene no es nada positivo” dijo la médica a modo de introducción. Sobre lo segundo, Tujuay consideró que la visión que los libertarios tienen sobre los pueblos originarios pueden estar bien sintetizado por el proyecto de ley presentado el año pasado por la vicepresidenta electa – Victoria Villarruel – para derogar la ley 26.160.
“Es conocida como Ley de Relevamiento Territorial Indígena y protege a las comunidades de los desalojos mientras se hace el relevamiento de cada una de las comunidades con la idea de avanzar – en algún momento – hacia la propiedad comunitaria y la garantía de acceso al propio territorio de los pueblos indígenas” preciso. Tujuay no desconoció la lentitud del proceso ante la falta de presupuesto para ejecutar los trabajos, pero resaltó que hoy esa ley supone “la única herramienta jurídica que desde el Estado protege a las comunidades y sus territorios contra la voracidad de los terratenientes y de las grandes empresas ganaderas y de monocultivo que buscan apropiarse de la tierra”.
Consultada sobre cómo imagina que su madre se comportaría ante el sombrío panorama que se vive por estos días, Tujuay aseguro que Octorina “no estaría en proceso de preparación, ya estaría preparada. Octorina habría participado activamente de la cuestión electoral-política; concientizando a las comunidades sobre la importancia de no votar a este gobierno que ganó. Hubiese estado claramente posicionada y hubiese votado otra realidad política. No es que no hubiera resistencia, pero si se fue permisivo para la entrada de ese mensaje a los hogares de las familias pobres e indígenas de la provincia que lamentablemente también fueron quienes lo votaron; porque a pesar de muchas cosas positivas que tuvieron gobiernos anteriores, las cosas se hicieron de forma incompleta. Y ahora estaría avanzando hacia la lucha como siempre”, sentenció.