El oficialismo busca tratar el proyecto antes del fin del período de sesiones ordinarias el 30 de noviembre, aunque deberá negociar apoyos adicionales.
El proyecto de privatización de la aerolínea de bandera recibió el respaldo mayoritario de La Libertad Avanza, Coalición Cívica, PRO, el Movimiento Integración y Desarrollo y la UCR en las comisiones parlamentarias. En contraste, Unión por la Patria presentó un dictamen de rechazo, mientras que Encuentro Federal y el sector Democracia para Siempre propusieron una alternativa que contempla la incorporación de capital privado manteniendo el control estatal.
Las reacciones no se hicieron esperar en el arco político. El presidente del bloque oficialista, Gabriel Bornoroni, defendió la medida argumentando la necesidad de terminar con «una empresa estatal deficitaria», mientras que el radical Rodrigo De Loredo respaldó la iniciativa alegando los altos costos operativos y la ineficiencia de la compañía. Desde la oposición, la diputada Julia Strada de Unión por la Patria cuestionó la ausencia de De Loredo en el debate en comisión.
En medio de las posiciones encontradas, surgieron voces que buscan una solución intermedia. El diputado Pablo Juliano, de Encuentro Federal, propuso superar la dicotomía entre gestión estatal y privada, sugiriendo un modelo mixto que combine eficiencia y control. El oficialismo deberá ahora conseguir los consensos necesarios para garantizar la aprobación del proyecto en el recinto.