“Por ríos, limpios, seguros, vivos y de todos”, es el título de la gacetilla que Vecinos Autoconvocados de La Caldera, Calderilla y Vaqueros produjeron para denunciar la situación. El jefe comunal Daniel Escalera en la mira.
El descontento de los vecinos tiene nombre y causa: la cooperativa Mesa Redonda que protagoniza una desmedida extracción de áridos en toda la zona de ribera desde el puente Wierna hasta el mismo pueblo de La Caldera. El enojo se canalizó con la confección de la Gacetilla mencionada que surgió de una reunión de vecinos que buscan dar visibilidad a un reclamo que cumple 5 años, mientras por otro lado pone de manifiesto la de respuesta por parte del Municipio de La Caldera, el Ministerio de Medio Ambiente y la Secretaría de Minería.
“Existen actualmente numerosas urbanizaciones que colindan con el rio La Caldera en áreas de extracción de áridos, dándose el absurdo de tener maquinaria pesada trabajando a pocos metros de las casas de barrios como el Duranzo y el Nogalar, así como también a lo largo de toda la costa ribereña” plantea el documento que precisa las consecuencias negativas de la actividad: contaminación sonora, degradación del paisaje y el medio ambiente, perjuicios al saludable desarrollo del poblado y de la calidad de vida de los habitantes tirando por tierra la pretendida vocación turística de La Caldera. “Se le suma a esto el riesgo producido por la degradación de las barreras naturales del cauce del rio, en temporada de lluvias y la crecida del caudal” enfatiza la publicación.
A la hora de remarcar la responsabilidad de los organismos públicos, se aclara que las áreas de explotación, los volúmenes y las reglas de la extracción de áridos los define la Secretaria de Minería de la Provincia que tiene la potestad de realizar convenios con los municipios para designarles el control y el cobro de un canon. “De esta manera, aunque el convenio existe, el reclamo gira en torno al control efectivo que debería realizar el Municipio sobre la Cooperativa Mesa Redonda”, manifiestan los vecinos.
Por si eso fuera poco, el intendente de La Caldera, Daniel Escalera, quien debería efectivizar ese tipo de controles es parte de la Cooperativa Mesa Redonda a la que debe controlar, denuncian los vecinos. Tal situación combinada con la ampliación de las áreas autorizadas para la extracción, han llevado a una situación de profunda desconfianza y malestar entre los vecinos.
“Las numerosas firmas obtenidas y el espontaneo interés de los vecinos de La Calderilla y Vaqueros muestran que la problemática no es solo de La Caldera sino de toda la cuenca de los ríos Caldera y Vaqueros y en ambos casos las autoridades no parecen preocupados con solucionarlos. Sino que las faltas sistemáticas de respuestas han evidenciado su posición en contra de estos pueblos” enfatiza la publicación que espera que la Municipalidad y las Secretarias de Minería y Medio Ambiente aporten soluciones que tranquilicen a los vecinos.