Padres exigen respuestas al Ministerio de Educación. La institución improvisa soluciones temporales para mantener la continuidad educativa.
El jardín de infantes de la escuela Provincia de Buenos Aires, en Villa María Esther, enfrenta una crisis educativa debido a graves daños en su infraestructura. Desde hace siete meses, los alumnos no pueden asistir a clases con normalidad debido a filtraciones de agua que han deteriorado severamente el techo del edificio.
La situación, que comenzó en diciembre del año pasado, ha llevado a la dirección del establecimiento a tomar medidas drásticas. Los estudiantes han sido divididos en dos grupos que asisten a clases en días alternos, utilizando un pequeño espacio de tres por tres metros originalmente destinado al almacenamiento de alimentos para la Copa de Leche.
A pesar de las reiteradas notificaciones al Ministerio de Educación y la presentación de un legajo técnico, las autoridades escolares aún esperan que se inicie el proceso de licitación para las reparaciones necesarias. La falta de respuesta por parte de las autoridades educativas, incluida la ministra Cristina Fiore, ha generado preocupación entre los padres y el personal docente, quienes temen que la prolongación de esta situación pueda afectar la matrícula del próximo año escolar.