Alfredo Naranjo fue detenido por robar una tienda, pero no perdió tiempo: escapó de la comisaría, asaltó una casa cercana y regresó con el botín. Ahora cumplirá 1 año y 2 meses de prisión efectiva.
El fiscal penal 2 de Metán, Gonzalo Gómez Amado, representó al Ministerio Público Fiscal en una audiencia donde se acordó un juicio abreviado para Alfredo Sebastián Naranjo. El hombre, que ya estaba detenido por robar una tienda, decidió ampliar su «repertorio delictivo» con un hecho que raya en lo surrealista: escapó del destacamento policial para robar una vivienda vecina y, con una audacia digna de mejor causa, regresó con los objetos sustraídos.
Los hechos comenzaron en junio de 2024, cuando Naranjo fue arrestado por ingresar con violencia a un comercio de Río Piedras y llevarse prendas de vestir y otros bienes. Sin embargo, su estadía en la comisaría no fue precisamente tranquila: aprovechó un descuido para fugarse y, en un acto que mezcla el descaro con la imprudencia, asaltó una casa colindante al destacamento. Lo más llamativo es que volvió con parte del botín, que luego fue encontrado escondido en una celda.
Tras confesar los hechos y aceptar un juicio abreviado, Naranjo fue condenado a 1 año y 2 meses de prisión efectiva. Además, el tribunal lo declaró reincidente por primera vez, un detalle que no hace más que subrayar su peculiar «dedicación» al delito.
