Los datos oficiales de la economía dicen que hay un freno de mano al finalizar el primer trimestre, una caída en el consumo y baja en actividades.
El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) del Indec calculó que en marzo hubo una mejora de tan sólo 1,4 por ciento interanual y una caída de 0,1 por ciento respecto a febrero.
Algunas de las causas se deben a la sequía que afectó la actividad agropecuaria y la contracción del consumo interno, principalmente afectados por el ajuste a obras de infraestructura, uno de los sectores de mayor aporte a la demanda local de bienes.
Por su parte, la actividad agrícola registró caída mensual de 5,5 por ciento en marzo por período estival. Asimismo lo hicieron, en menor medida, los rubros Otras actividades de servicios comunitarios, sociales y personales (-1,4%); Electricidad, gas y agua (-0,9%); y Administración pública (-0,2%).
Si bien desde la cartera que dirige el ahora superministro Nicolás Dujovne, el Ministerio de Hacienda, celebraron el crecimiento de otros sectores como Hoteles y restaurantes (4,5 por ciento) e Intermediación financiera (3,3 por ciento), las proyecciones para el crecimiento no son las mejores.
Tanto consultoras privadas como organismos multilaterales, entre ellos el FMI, reconocen que habrá mayor inflación y menos crecimiento económico en el país. Los pronósticos avizoran que con la corrida cambiaria de mayo los datos van a ser significativos en el traslado a precios y la nueva caída del poder adquisitivo.
El EMAE acumula una suba de 3,5 por ciento en el primer trimestre de lo que va del año, lo cual significa un alza del 1,1 por ciento. Aún faltan analizar datos con la corrida cambiaria y el pronóstico ante las sequías para la actividad agropecuaria.
