Para el consultor Benjamín Gebhard la unidad no suponía el triunfo “K” sobre los oficialismos, pero aseguró que la fragmentación dificulta el acceso de ese espacio a bancas parlamentarias y la consolidación de un espacio de cara al 2023.
Consultado si los comicios realizados en las provincias de Misiones y Jujuy permiten pronosticar algo de lo que ocurrirá en Salta el próximo 14 de agosto, el Director de la Consultora WE dijo que se trata de escenarios independientes con algunos denominadores comunes. “El primero es que los oficialismos no han sufrido para imponerse. La previa era toda una discusión. Uno veía elecciones en otros lugares del mundo en donde los oficialismos caían derrotados por el impacto causado por la pandemia en lo sanitario y en lo económico”, dijo a modo de introducción en el programa CUARTO OSCURO que se emite por el aire de FM La Cuerda (104.5).
Gebhard resaltó que el tablero político – electoral salteño se parece más al de Misiones que al jujeño. “En Misiones existe un espacio provincial – el Frente Renovador – que hace mucho tiempo gobierna esa provincia y que va administrando su relación con los polos de la grieta que son el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Distinto a lo de Jujuy que es gobernada por radicales. Otro denominador común es que son lugares en donde el Frente de Todos no logró la unidad. Si hubiera estado unido no se habrían impuesto a los oficialismos, pero hubiera sido distinta la distribución de bancas y habrían consolidado un espacio de referencia para la sociedad de acá al 2023”, precisó.
En ese punto, el consultor se mostró sorprendido que la división del Frente de Todos en Misiones, Jujuy y Salta se produjera con el recuerdo fresco de la gran lección política que impartió la actual vicepresidenta en el año 2019. “Cristina da un paso al costado para ser candidata a vicepresidente, encuentra un candidato independiente y le levanta el veto a actores que habían sido muy opositores a ella como Sergio Massa. Resulta imposible de entender que no eso no se haya podido replicar en otros lugares. Me da la sensación que a nivel nacional el Frente de Todos lo entiende y lo tiene como premisa de que van a hacer lo que deba hacerse para mantener la unidad para volver a imponerse”, respondió.
Puesto a opinar sobre el porqué de tamaño error, el consultor manifestó. “Me gustaría saber porque en las provincias no se aprendió esa lección. Escapa a algo que parece incluso de sentido común. Porque también una campaña electoral es un proceso muy costoso en términos de estructura, de acceso a los medios, a herramientas de publicidad y hasta de interpelar a gente en el sentido de que te vean y te presten atención. De allí que no es lo mismo tener cuatro candidatos que tener uno solo para colgarle el cartel, distribuirle el folleto o armarle una reunión. A veces uno termina creyendo que hay una gran incapacidad de la dirigencia nomas”, concluyó.
Sobre la calma que existe entre los candidatos salteños para los comicios provinciales a un par de semana del inicio de la campaña, el consultor opino: “uno podría bien pensar que están esperando que empiece la campaña, pero también tiene que ver con otra cosa: perciben un clima en donde la gente discute otras cosas, carga con otros problemas y por lo tanto anticiparse mucho es protagonizar una conversación sin interlocutores. Esto no quiere decir que la gente no desee ir a votar, solo que tiene sus tiempos. Además, los objetivos de cada frente son distintos, eso hace que las estrategias sean distintas y los tiempos para aplicarlas también. Se suma a que muchos candidatos son conocidos y por ello no tienen desesperación por salir de antemano. De alguna manera nadie está poniendo en discusión que los frentes del gobernador y de la intendenta son los que van a salir primero. Esa suma de factores hace que todavía todo esté muy tranquilo”, sentenció.
