La Gobernación de Tarija afirma que la carne de pescado de este afluente tiene presencia de minerales por encima de los niveles permitidos. Piden que los estudios sean realizados por autoridades ambientales de ese país, Argentina y Paraguay.
Mientras la gobernación tarijeña denuncia contaminación, el Gobierno central de ese país desacreditó los estudios y aseguran que un informe de monitoreo descarta afectación en la fauna ictícola. Considera dudoso el análisis realizado por un laboratorio.
El informe brindado por Tarija el pasado 3 de agosto da cuenta que las muestras fueron tomadas en cinco puntos del río Pilcomayo, entre el 13 y 21 de julio. Luego esto fue enviado al Instituto Nacional de Salud Ocupacional. El INSO, tras analizar la carne de pescado en la especie del sábalo, advierte la presencia de mercurio hasta en 0,81 mg, cuando el límite permisible es de 0.5 mg, de acuerdo al Codex Alimentario que utiliza la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El viceministro de Medio Ambiente, Magin Herrera, entrevistado por Unitel Tarija, calificó de “información dudosa” al informe brindado por la Gobernación de Tarija sobre la contaminación en el Pilcomayo. Explicó que esta repartición del Gobierno envió 11 técnicos y detalló que las especies analizadas, han sido en sábalo, bagre, boga y sardinas.
