El expresidente no respetó la normativa que obliga a pasar 7 días en el mismo domicilio. Desde el entorno del expresidente aseguran que pidió autorización en Migraciones y en el Ministerio de Salud bonaerense.
Tras el escándalo y los duros cuestionamientos a Alberto Fernández por el festejo del cumpleaños de la primera dama, algo que iba en contra de la normativa vigente entonces; ahora el expresidente Mauricio Macri fue noticia también por no hacerle caso al protocolo sanitario actual que exige un mínimo de 7 días de aislamiento tras el regreso de un destino como Europa.
Según informó La Nación, Macri retornó al país desde Suiza junto a su hija Antonia el lunes. Declararon como domicilio para cumplir el aislamiento la casa que Macri tiene en la localidad de Acassuso, partido de San Isidro. Pero a los pocos días, los fiscalizadores de Salud y Jefatura de Gabinete bonaerense comprobaron que no estaba en la casa.
Previa a esa visita de los inspectores, las autoridades sanitarias bonaerenses aseguran haberse contactado, desde el Centro de Telemedicina, dos veces y que Macri les aseguró que estaba en el domicilio de San Isidro.
Por eso se convocó a un inspector de la Dirección de Fiscalizaciones del Ministerio de Salud bonaerense que labró un acto a las 18.30. Incluso, indicaron que le iniciarían una denuncia penal.
La versión de Macri
Desde el entorno del líder del PRO señalaron que «había pedido autorización a las autoridades y que avalaron el cambio de lugar de aislamiento».
Explicitaron que a los dos días del aislamiento «por un problema en el domicilio, el expresidente envió un mail a las autoridades sanitarias provinciales para cambiar el lugar de aislamiento».
Macri se dirigió luego a su quinta Los Abrojos, ubicada en Malvinas Argentinas, junto a Antonia, y permanecen allí.
Desde migraciones indicaron que «no hay constancia alguna de que se haya notificado o informado sobre cambios respecto del lugar de aislamiento que debía cumplir. No hay registros».