Lo hizo en su informe Panorama Económico Mundial. También hay cortocircuitos con las proyecciones de inflación.
El equipo del Fondo Monetario analizó una contracción de la economía argentina de 2,6% para este año y de 1,6% en 2019. Los datos fueron recalculados nuevamente luego de los desequilibrios en las cuentas locales y como monitoreo al acuerdo stand by.
Las cifras del organismo multilateral apuntan a una recesión mucho más acelerada que la que el gobierno de Mauricio Macri admite. En el proyecto de ley de presupuesto el oficialismo estima una caída del PBI de 2,4% para este año y de 0,5% el año próximo.
Además, las proyecciones de inflación también son un cortocircuito entre los números que manejan en Washington y en Hacienda. Mientras el FMI pronostica inflación anual en 2019 en 20,2 por ciento, el Gobierno estima que será del 23%.
“La actividad se frenó de manera más marcada en la Argentina, Brasil y Turquía, donde incidieron factores específicos de estos países y la inquietud de los inversores”, dice el documento de la entidad que conduce Christine Lagarde.
No es la primera vez que el Fondo corrige sus pronósticos sobre la economía argentina, que presenta serios inconvenientes. El mix de políticas económicas y monetarias que aplicó Cambiemos obligaron a recalcular números.
Las estimaciones son parte de las condiciones que pusieron al Gobierno Nacional para girar dólares frescos. Y sólo en ése escenario de cumplimiento puro y duro, habrá crecimiento de la economía en 2020 con un 2,7 por ciento y en 2021 de 3,2%.
