Es una de las referentes de los organismos de Derechos Humanos y figura clave en la conformación del Archivo. Hoy habló del caño roto que estropeó documentación “única y valiosa” sobre los oscuros años de la dictadura en Salta.
El Archivo de la Memoria comenzó a forjarse cuando los organismos de DDHH precisaban de documentos para pruebas judiciales en los juicios por los delitos de lesa humanidad en la provincia. Sirvieron de mucho para ese objetivo, pero también como acervo documental para quienes desean producir material historiográfico sobre los negros años de la dictadura en nuestra provincia.
Un caño roto en el edificio de la Biblioteca Provincial provocó daños en muchos de esos documentos esenciales. Se mojaron por encontrarse en cajas sobre el piso y sin estantes, pese a que el único trabajador encargado de esos archivos ya había realizado reclamos al Ministerio de Gobierno. CUARTO OSCURO (FM La Cuerda 104.5) dialogó con Cristina Cobos, una de las referentes de los organismos de Derechos Humanos en Salta y figura clave en la conformación del archivo.
Admitió que lo sucedido fue como si le amputaran una parte del cuerpo y del alma. “Esto me shockeó. Jamás pensé que iba a suceder una cosa de tal envergadura. Hubo otros accidentes por ejemplo la rotura de un caño del aire acondicionado, pero nunca la cantidad de agua que pasó ahora. Fue una inundación directamente. Es tremendo. La documentación que tiene el archivo es única y valiosa”, dijo a modo de introducción.
Cobos recordó que fue la primera Coordinadora del Archivo desde el año 2012 hasta el 2019, aunque resaltó nunca haber tenido apoyo de los gobiernos de turno. “No se compraron estanterías para ubicar la documentación como corresponde y ustedes habrán visto que están en cajas y en el piso. Ese es el estado en el que estaba y está el Archivo de la Memoria”, denunció para luego repasar someramente el material que contenía el organismo: documentación de los presos políticos salteños desde 1955 a 1983; todo el fondo documental de los ministerios de Gobierno salteños desde 1960 a 1983 en donde están las actuaciones de las dictaduras cívicas – militares; la instrucción del secuestro y desaparición del exgobernador Miguel Ragone; documentación cedida por el gobierno nacional. “Hoy estamos en una situación de ver qué se puede rescatar porque esto va a llevar mucho tiempo”, resaltó, para luego destacar la colaboración del personal del Archivo Histórico en el empleo de mecanismos de secado del material.
Consultada sobre por qué el material no estaba con el resto de la documentación del Estado y en proceso de digitalización, la referente explico. “Entre los reiterados pedidos que hice a lo largo de los años estuvo el de impresora, digitalizadora, fotocopiadora. Nunca nos dieron. Tengo todos los expedientes. Llegaban a la secretaría de Hacienda y ahí morían. Conseguí a duras penas un scanner que era prestado. La computadora también es prestada”, lamentó para luego agregar que desde su creación institucional el organismo depende del Ministerio de Gobierno, hoy a cargo de Ricardo Villada.
Finalmente, Cobos hizo un poco de historia al respecto. “Cuando me nombran a mi como Coordinadora [2012] los organismos estábamos desesperados por conseguir documentación por el Juicio de la Megacausa porque necesitábamos más pruebas para conseguir las condenas de los represores. Me nombran y lo primero que hago es ir a la cárcel y traigo toda la documentación que podía buscando pruebas. Y así fue, se consiguieron las pruebas. Esas pruebas salieron de acá: del Archivo de la Memoria. El Juzgado Federal, la Fiscalía Federal o los Tribunales Orales están permanentemente pidiendo documentación probatoria”, concluyó.