El abogado defensor anunció que pedirá la libertad de Sergio Vargas, el hombre sindicado como el homicida de la mujer asesinada en 2017. Cornejo cambió de nuevo a los fiscales a cargo.
Los familiares y amigos de Sergio Vargas, el único detenido por el asesinato de Jimena Salas, protestaron esta mañana en Ciudad Judicial para exigir su libertad. Es que consideran que es un “perejil” que está acusado infundadamente.
Vargas está acusado de ser el supuesto sicario de Salas, la mujer apuñalada en un barrio del municipio de Vaqueros en 2017. Se trata del primer detenido en una causa amañada de irregularidades en su proceso de investigación, motivo por el cual el Procurador General de la Provincial, Abel Cornejo, sustituyó a los fiscales que estaban a cargo.
El abogado defensor, Luciano Romano, cuestionó la imputación de Vargas por considerar que “es medio raro” hablar de su culpabilidad cuando aún la Fiscalía no demostró la existencia de un autor intelectual del homicidio.
Además, según consigna FM 89.9, Romano adelantó que pedirán la libertad del acusado hasta que se levante el secreto sumario de la causa y puedan acceder al expediente para conocer los detalles de la investigación.
La investigación comenzó en manos del fiscal Pablo Paz y luego se incorporó Rodrigo González Miralpeix. Sin embargo, Cornejo los removió y dispuso que continuaran Ramiro Ramos Ossorio y Pablo Rivero. Pero la última información que circula es que ahora el Procurador nombró a Ana Inés Salinas Odorisio y Gustavo Torres Rubelt como nuevos fiscales.
