Daba desayuno y merienda en las escuelas públicas salteñas. Desde el Gobierno consideran que la ayuda de Nación reemplaza ese aporte.
La Copa de Leche no regresa. Desde que fue dada de baja a fines de 2019, el Gobierno de la Provincia no volvió a reactivarla por considerar que no hay fondos disponibles y porque la ayuda que llega desde Nación logra suplantarla. Lo sostiene a pesar del aumento de los índices de pobreza.
La Copa de Leche alcanzaba a 120 mil alumnos de escuelas públicas salteñas. Repartía desayuno y merienda. Se financiaba a través de la Cooperadora Asistencial de Capital por medio de un impuesto provincial que dejó de existir en diciembre de 2019.
El Tribuno informó que el programa constituía el primer plato de comida e, incluso, el más importante del día para muchos niños. Agregó que el coordinador de Enlace y Relaciones Políticas de la Gobernación, Pablo Outes, había asegurado que la Copa de Leche iba a pasar al Ministerio de Educación. Sin embargo, desde la cartera que lidera Matías Cánepa aseguraron que nunca la absorbieron.
«Cuando inició 2020 el Gobierno nacional destinó una gran cantidad de fondos a políticas sociales de apoyo a sectores carenciados. Todo buscaba resguardar el bolsillo de la familia para fortalecer la alimentación de sus hijos. A nivel país y provincia cayeron los tributos, pero entendimos que había una buena cobertura a través del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación», manifestó Outes al explicar las razones para no reactivar la Copa de Leche.
Además, dijo: «Tenemos un 40 por ciento de caída de la recaudación y aumentaron un 400 por ciento los fondos para Desarrollo Social. Con estos programas se apunta a fortalecer el ingreso para que la familia tenga un ingreso adicional y pueda suplir la cuestión alimentaria. La Copa de Leche era un suplemento adicional».
Sin embargo, testimonios recogidos por el matutino aseguran que «muchos chicos van con hambre a la escuela”.
