Un matutino local asegura que ex funcionarios de la ex intendenta habrían reconocido giros de dinero para empresas que no terminaban los trabajos. Daniel Amador en la mira.
El escándalo por las obras de la gestión anterior en la Municipalidad de Salta continúa, pese a que Bettina Romero ya dejó su cargo y que pasó más de una semana con Emiliano Durand liderando el CCM.
Pero ahora se destapan algunas ollas que ya se intuían a punto de estallar. Una de ellas es la de obras que no se habrían realizado durante la gestión Romero que fueron pagadas de todas maneras.
Así lo informó Nuevo Diario este lunes. El matutino aseguró que expedientes municipales dan cuenta de que los ex funcionarios de Obras Públicas María Eugenia Ángulo y Luis Racioppi reconocen que en más de una docena de proyectos se pagó más de lo que correspondía y pedían la suspensión de pagos a la secretaría de Hacienda a cargo de Daniel Amador.
El artículo agrega que Amador siguió pagando pese a la grave advertencia. Sería una docena de proyectos que remitirían a obras sobrecertificadas. En algunos casos, se sospecha que se habrían pagado íntegramente obras que nunca llegaron a concretarse. En otros, los desembolsos serían muy superiores al porcentaje de avance de las obras.
La principal empresa en la mira es Norte Áridos de Augusto Dal Borgo, una de las empresas más beneficiadas en la gestión de Bettina Romero. Entre las obras encomendadas a la empresa citada se encuentra nada menos que la refacción de la plaza 9 de julio, cuyo presupuesto se triplicó a pesar de que los trabajos aún no terminaron. Los desmanejos se acrecentaron después del 14 de mayo una vez consumada la derrota electoral del romerismo.
Esto último habría alertado a Ángulo y Racioppi, que buscando despegarse de esas supuestas irregularidades confeccionaron un expediente que, con lujos de detalles, describe lo ocurrido y aconsejan a Amador suspender los pagos hasta regularizar los avances. Amador hizo caso omiso y continuó pagando.
