La empresa brasilera retomará operaciones en la ciudad de Chivilcoy y anunciaron un plan para producir 15.000 pares de botines mensuales en la nueva planta bonaerense.
El anuncio lo realizó el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli: «Recibí al director de Penalty Argentina, quien me contó que retomarán la producción de botines en el país, después de haber cerrado su fábrica en 2018. Un gran proyecto que generará 150 puestos de trabajo en su planta de Chivilcoy, Buenos Aires», expresó en un tuit.
«El objetivo de Penalty es producir 15.000 pares de botines mensuales en la nueva planta bonaerense. Ese calzado es muy utilizado por los jugadores amateurs de Fútbol 5. Además, también retomarán la fabricación de indumentaria, en este caso, en la planta Sportech del barrio porteño de Agronomía», informó hoy el medio BAE Negocios.
«En marzo de este año, la empresa de capitales argentinos, Bicontinentar Footwear Technologies, volvió a reabrir la fábrica que pertenecía a Paquetá, que por años le produjo a grandes marcas como Adidas. Ahora, con 16 líneas de montaje realiza artículos para New Balance, Joma y, ahora, a Penalty. Los directivos indicaron a la prensa que en las primeras 72 horas, la fábrica recibió 2.000 solicitudes de trabajo, y que esperan poder contratar a alrededor de 300 personas para fin de año», informaron desde el medio antes señalado.
La empresa brasileña de calzado e indumentaria produjo botines en el complejo de la empresa Senda de Florencio Varela entre 2010 y 2018. Penalty había desembarcado en el país a fines de 2006, cuando planificaban expandir la marca mercados internacionales.