Se trata de un sujeto de 35 años que residía en la comunidad Cuña Muerta, al norte de la ciudad de Tartagal. El hallazgo del cuerpo ocurrió el lunes tras el alerta dado por un familiar de la víctima. Por ahora no hay sospechosos.
Por el hecho, el fiscal penal interino, Pablo Cabot, de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas en Tartagal, lleva adelante una serie de investigaciones.
El cuerpo de la víctima se encontró el lunes por la noche, sobre la cama de la casa en que habitaba. Estaba acostado boca arriba, presentaba lesiones en su cabeza y había manchas de sangre en las paredes y el suelo de la habitación. “El cuerpo del hombre fue trasladado a la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán para realizar la autopsia correspondiente por peritos del CIF” destacó la emisora FM Alba.
El fiscal solicitó también la colaboración de la Unidad de Investigación UGAP Tartagal para llevar a cabo la recolección de testimonios, entrevistas y la revisión de cámaras de seguridad tanto públicas como privadas con el objetivo de identificar al posible responsable.
“Un familiar de la víctima fue el que alertó al Servicio de Emergencias 911, dado que no tenía noticias desde el sábado por la tarde. En el lugar trabajaron tanto personal de Policía Científica como Bomberos de Policía, tareas que realizaron ayer” destacó el medio citado.