Agentes irrumpieron en la casa equivocada en un barrio oranense, causando daños y trauma a los residentes.
En el barrio Libertad, de San Ramón de la Nueva Orán, una familia se vio envuelta en un violento allanamiento policial por error. Según testigos, la Brigada de Investigaciones rodeó una vivienda y procedió a derribar puertas en busca de objetos robados, mientras los niños de la familia gritaban aterrorizados en el interior. Lo que debía ser un operativo rutinario se convirtió rápidamente en una escena de caos y confusión.
El error se hizo evidente cuando se descubrió que la orden judicial mencionaba a una persona que residía dos casas más allá. A pesar de esta revelación, los agentes continuaron con el operativo, sometiendo violentamente al dueño de la casa y causando destrozos en la propiedad. La situación alcanzó un punto crítico cuando, aparentemente al percatarse de su equivocación, los efectivos intentaron «plantar» evidencia ilegal en forma de pastillas.
Ante este abuso de autoridad, la víctima, identificada como Cristian, no solo se defendió verbalmente sino que también se ofreció a someterse a exámenes toxicológicos para demostrar su inocencia. El incidente ha culminado con la presentación de una denuncia formal por parte de Cristian, quien busca que se tomen medidas judiciales contra los responsables de este allanamiento ilegal y violento que ha dejado a una familia traumatizada por un pésimo desempeño policial.
