La periodista publicó hoy una columna sobre lo que denominó el peronismo «sensible» que conforman el tigrense y el salteño. “Se saben jaqueados por izquierda y por derecha (…) pero hacia allá van, acicateados por la adversidad”, enfatizó Gutiérrez.
El artículo fue publicado en el portal Infobae. De entrada nomás definió lo que entiende por peronismo «sensible»: los que se desmarcaron rápido de Cristina Kirchner, los que juran no querer tener más nada que ver con ella; los que supieron «colaborar» con el Gobierno y hoy dicen sentirse ninguneados, los que no reniegan por tener que bajar el déficit pero dicen no estar dispuestos a ser socios en la pérdida sin participación en ganancia alguna, los que sostienen que Macri los necesita pero a la vez sigue alimentando la pervivencia del kirchnerismo.
Independientemente de ello, Gutiérrez asegura que tanto Massa como Urtubey creen que Macri no quiere contar con ellos para la aprobación del presupuesto porque el presidente preferiría que la desaprueben el presupuesto para prorrogar el actual con lo cual mataría dos pájaros de un tiro: “podría moverse con más comodidad en la faena del ajuste y a la vez tendría un argumento para responsabilizar a la oposición de las dificultades del momento”.
A la hora de analizar el escenario electoral que se aproxima, Gutiérrez asegura lo siguiente: “Lo primero es recuperar el control del partido, para eso confían en que la Justicia habilite una nueva intervención colegiada, sin José Luis Gioja ni Luis Barrionuevo, en orden a normalizar. Entre los desilusionados del PRO y los nostálgicos del filo-kirchnerismo se proponen habilitar un atajo. Están absolutamente convencidos de que Cristina competirá en octubre del 19 y la quieren jugando afuera del PJ. También los anima la certeza de que la elección presidencial se definirá por ballotage”.
“El tiempo apremia. Trabajan preparando el «branding» del nuevo espacio. La presentación en sociedad no puede pasar de agosto, de la tercera semana para ser más precisos. Nada de actos ni cosas rimbombantes. Se trata de ir instalando la idea de una unidad posible. Los más intensos y entusiasmados dicen que el liderazgo se tiene que dirimir entre Sergio Massa, regresando al PJ, y el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey. Si algún otro quiere subir al podio, que lo intente, pero va por ahí, es lo que hay. Confían en acortar diferencias y avanzar sobre un territorio que reconocen minado por la dificultad. La idea es abrir un lugar alternativo. La única opción no puede ser «entre la loca y los globos amarillos», dramatizan.
Se saben jaqueados por izquierda y por derecha, haciendo un delicado equilibrio entre lo necesario y lo conveniente, pero hacia allá van, acicateados por la adversidad·.