Sería “la” forma para amortiguar a futuro los aumentos en las facturas de luz: calcular las tarifas según el horario en el que se consuma la energía. Quieren incentivar a usar energía en momentos del día en los que hay menor demanda.
“El objetivo del proyecto impulsado por el ENRE sería lograr un consumo más eficiente, reducir los picos de consumo y aprovechar mejor la infraestructura a un costo menor. Sin embargo, es necesaria una inversión grande en medidores inteligentes y otras cuestiones que demorarían los plazos para implementarlo”, indican medios nacionales como Radio Mitre.
En ese sentido, se deslizó la posibilidad de que hogares argentinos utilicen el lavarropas después de la medianoche al considerar que este electrodoméstico como otros de uso común (secarropas, plancha, horno eléctrico, computadoras portátiles) requieren de un alto consumo eléctrico.
En el documento oficial del proyecto se dice lo obvio: “Los picos de consumo desafían la estabilidad de la red eléctrica. La infraestructura capaz de soportarlos sin sobresaltos es costosa, y la inversión requerida resulta especialmente onerosa ante la constatación de que, salvo casos excepcionales, dicho soporte despliega su potencial durante períodos diarios cortos”. Por todo esto es que delimitan como objetivo final “reducir la intensidad de los picos posibles” y ponen como ejemplo a varios países europeos que ya implementan un sistema casi idéntico.
En el proyecto que impulsa el Gobierno, las tarifas que se cobrarían dependerán del consumo de cada hogar, pero el precio del kW/h variará según el horario de utilización de la energía. Así lo ejemplifico el ENRE en su informe:
- Es más alto en las horas de mayor consumo: los días laborales de 9 a 14 y de 18 a 22.
- Es más bajo los días laborales de 00 a 8 y todas las horas de sábados, domingos y feriados.
- Es intermedio los días laborales de 8 a 10, de 14 a 18 y de 22 a 00.
