Así lo señala un reciente informe. El sector de maquinarias y equipos no se salva, registrando una disminución del 5,5% anual.
La economía argentina enfrenta un panorama desalentador, con la inversión privada experimentando una contracción significativa del 22,3% en marzo, según un informe de la consultora Orlando Ferreres. Esta caída se suma a una merma acumulada del 16,6% durante el primer trimestre del año, reflejando las consecuencias de los ajustes implementados por el Gobierno.
Según informó hoy Ámbito, el sector de maquinarias y equipos no ha sido ajeno a esta tendencia negativa, registrando una disminución del 5,5% en la medición anual y acumulando una merma del 7,2% en los primeros tres meses del año. Mientras que los equipos importados mostraron un avance del 5,8%, los de origen nacional cayeron un preocupante 19,8%.
La construcción, por su parte, ha experimentado una aceleración en la velocidad de la caída, anotando un nivel 36,1% menor al del mismo mes del año pasado. Según la consultora, «semejante contracción solo fue registrada por este indicador en el período 2001-2002 y durante los meses de cuarentena de 2020».
La situación es crítica, y el informe de Orlando Ferreres no augura un cambio de tendencia a corto plazo. «Durante marzo empeoraron los indicadores de actividad, y la estimación de inversión bruta no fue la excepción», señala el trabajo, advirtiendo que «la tendencia contractiva se aceleró, particularmente por la situación en el sector de la construcción, donde el panorama es desalentador».
