La marcha de ayer tuvo diversas consignas y una pluralidad de voces, pero todas acordaron lo mismo: la ausencia del Estado para subsanar la violencia.
Las calles del centro de la ciudad se llenaron de color con una caravana que tuvo su epicentro en la Plaza 9 de Julio alrededor de las 18. Pero si bien todo transcurría de una manera amena, el reclamo de la marcha no era del todo “feliz”.
La violencia institucional, de las fuerzas de seguridad (sobre todo de la policía salteña) hacia el colectivo y los derechos de la infancia trans, fueron los reclamos principales.
Mary Robles, coordinadora regional de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgénero de Salta, en una entrevista para Aries comentó: “No tenemos políticas públicas, nos están matando, hay 41 mujeres trans en lo que va del año y murieron por diferentes causas. Por ejemplo, no tenemos viviendas propias, educación, salud, entre otras carencias. Queremos que el mismo Estrado nos dé una solución y deje de perseguirnos”.
Otro de los reclamos, expresados por robles al medio DNI, en relación al trabajo trans: “Nos estamos muriendo de hambre por no tener acceso a oportunidades igualitarias, a pesar que se aprobó la ley de identidad de género y el matrimonio igualitario hace más de 7 años” dijo.
“Queremos políticas públicas, después nos sentaremos a hablar si hay zona roja porque la prostitución no va a terminar nunca, hay gente que trabaja y vive de eso y hay que cuidarlas”, concluyó.
