En medio del escándalo que suponen los incrementos, la presidenta del senado habilitó a que cada senador pueda rechazar el ajuste salarial. Juan Carlos Romero, Sergio Leavy y Nora Giménez guardan silencio.
En medio de una fuerte polémica por el aumento de las dietas de los senadores a más de 9,5 millones de pesos, los senadores de La Libertad Avanza y tres de la UCR renunciaron formalmente al incremento de sus ingresos. La decisión surgió luego del decreto que firmó la presidenta de la Cámara Alta, Victoria Villarruel, que habilita a cada senador a rechazar por escrito el ajuste salarial, tras el último acuerdo paritario con los gremios legislativos.
Tras el enganche con las paritarias de los trabajadores del Congreso, el salario bruto de los senadores se elevó a $9,5 millones. La cifra escandaliza a todos y obliga a ejecutar movimientos a la propia vicepresidenta y a los legisladores del bloque libertario. La primera buscó amortiguar el escándalo firmando el Decreto que aceptando el incremento del 1,3% para los salarios de abril y un bono de 100 mil pesos para los trabajadores legislativos que se trasladan a los senadores; establece en su artículo tercero que habilita a cada senador a rechazar “total o parcialmente” la adecuación de sus dietas. Traducido: Villarruel abrió una vía individual de renuncia al incremento sin impedir que el aumento se hiciera efectivo.
Desde el bloque que responde al presidente Javier Milei también decidieron tomar distancia al emitir un comunicado en donde informan que renunciarán al incremento. “Mientras los argentinos están haciendo un tremendo esfuerzo, los senadores de esta Casa no podemos aumentarnos el sueldo”, postularon los senadores.
La UCR también se sumó a la decisión. Los mendocinos Rodolfo Suárez y Mariana Juri enviaron una carta formal a Villarruel en la que expresaron “la voluntad de que no se apliquen a nuestras respectivas dietas el reajuste implicado y establecido”. Lo mismo hicieron la santafesina Carolina Losada y el porteño Martín Lousteau, también de la UCR. Por su parte, los radicales por Corrientes, Eduardo Vischi y Gabriela Valenzuela, anunciaron ayer que renunciaron al aumento de sus dietas.
De esta manera, son al menos 12 los senadores que ya formalizaron su rechazo al aumento, en una señal política que busca evitar quedar asociados al privilegio salarial en un contexto de ajuste generalizado. El resto no se ha expresado. Entre ellos se incluyen los tres salteños: Juan Carlos Romero, Sergio Leavy y Nora Giménez.