Tanto el denunciante como el denunciado llevan apenas tres meses en los cargos que ahora ocupan. Fueron designados tras el hallazgo de 400 kilos de cocaína en un móvil policial que obligó al ministerio de Seguridad a remover la cúpula de entonces.
Quien ratificó la denuncia fue el comisario Martín Flores Saravia, el 2° jefe de la Unidad Regional 4. El denunciado, por su parte, es el Director de la Unidad, Comisario General José Alfaro, quien al momento de llevarse a cabo la auditoría administrativa se encontraba en la capital salteña realizando un curso. Según el sitio FM Alba, desde la capital salteña Alfaro negó los cargos.
“Las acusaciones del comisario Flores Saravia imputan al director policial de desviar fondos de trabajos adicionales de efectivos a través de una cuenta bancaria cuyo titular sería un Cabo que se desempeña en la Unidad. Estos adicionales se cumplían en una finca, donde también se distribuía dinero cuyos montos oscilarían entre seis y siete cifras, a cargo del mismo cabo de Policía”, destacó el medio citado.
Lo curioso del caso es que tanto el denunciante como el denunciado ocuparon los cargos que ostentan en julio de este año tras el hallazgo de 400 kilos de cocaína en un móvil policial y la detención de dos efectivos a cargo de Gendarmería Nacional. El Ministerio de Seguridad de Salta dispuso entonces la remoción de la cúpula de la UR4 y el traslado de buena parte del personal.
