Esos son los datos para el primer semestre de 2024 difundidos por el INDEC. El deterioro económico y la pérdida de empleo informal son factores clave en este incremento.
La crisis económica en Argentina ha alcanzado niveles alarmantes, con un aumento significativo en los índices de pobreza e indigencia durante el primer semestre de 2024, que coinciden con los primeros meses del gobierno de Javier Milei. De acuerdo con el informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la pobreza saltó del 40,1% al 52,9% en comparación con el mismo período del año anterior, mientras que la indigencia escaló del 9,3% al 18,1%.
Estas cifras representan un incremento de 12,8 y 8,8 puntos porcentuales respectivamente, lo que se traduce en aproximadamente 19,5 millones de personas viviendo en condiciones de pobreza y 5,6 millones en situación de indigencia. Los datos revelan que más de la mitad de los niños y adolescentes de 0 a 14 años se encuentran en situación de pobreza, siendo las regiones del Noreste (NEA) y Noroeste (NOA) las más afectadas.
El deterioro de la situación económica se refleja en la caída del poder adquisitivo de los trabajadores. Según el INDEC, el índice de salarios promedio para los trabajadores formales fue un 15% inferior en términos reales durante el primer semestre de 2024, en comparación con el promedio del segundo semestre de 2023, considerando la inflación de la Canasta Básica Total.
El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA) confirmó esta tendencia, reportando que la pobreza alcanzó un récord del 52% desde 2004, con un pico del 54,9% en el primer trimestre del año. La desaceleración de la inflación y un leve repunte de los salarios reales permitieron una ligera mejora hacia el final del semestre.
Expertos como Agustín Salvia, director del ODSA-UCA, señalan que la pérdida de empleos en el sector informal y los bajos salarios en el sector privado son factores cruciales en el aumento de la pobreza e indigencia. La situación ha profundizado la desigualdad entre los distintos sectores de trabajadores, afectando principalmente a aquellos que dependen de programas sociales y no han logrado recuperarse económicamente.
