Es por un hecho ocurrido en 2018.
El INADI Salta emitió un dictamen en el que asegura que el Colegio Santa María incurrió en actos discriminatorios y de homofobia contra alumnos del establecimiento al no permitirles utilizar una pulsera con los colores de la diversidad y luego castigarlos.
«Los elementos representativos de una creencia, pensamiento, identidad, entre otros, que se encuentren protegidos legalmente por la legislación antidiscriminatoria no pueden ser sometidos a un proceso institucional que implique que el alumno tenga que dar cuenta ante las autoridades de sus motivos para que luego los ponderen», señala la resolución.
El Tribuno recordó que todo comenzó cuando Santiago Coraita, por entonces de 16 años, fue advertido por utilizar una pulsera con los colores que representan un mensaje de diversidad e inclusión que identifica al colectivo LGBTIQ+. Un tutor lo llamó aparte para informarle que por orden de la dirección debía sacársela porque iba «en contra de los valores» del colegio.
Luego, el colegio castigó a cuatro compañeros de Santiago que se solidarizaron con él y subieron una foto luciendo los mismos colores. Les pusieron 14 firmas que los dejaban al borde de la expulsión y les comunicaron que debían irse a otra escuela cuando terminara el año.
Tres años después, tras un proceso que involucró al Ministerio de Educación, abogados y el propio INADI, se concluyó que el colegio cayó en actos de discriminación y homofobia. El organismo nacional, que en nuestra provincia encabeza Gustavo Farquharson, aseguró que las autoridades no podían desconocer qué significaba esa bandera luego de la sanción de las leyes nacionales de matrimonio igualitario e identidad de género, que implicaron una difusión masiva durante años de los símbolos contra la homofobia, la lesbofobia y la transfobia.
Te puede interesar:
Homofobia en el Santa María | Estudiantes realizarán un «pulserazo» en la puerta del colegio
