El director del Ente Regulador de los Servicios Públicos, Carlos Morello, defendió la decisión de terminar con los subsidios a los servicios de agua y cloacas en inmuebles propiedad de la Iglesia Católica.
“Con esta medida cuestionamos la capacidad contributiva de la Iglesia y de los colegios católicos que cobran cuotas altas y que, en consecuencia, pueden pagar esos servicios” explicó y aclaró que “aquellos colegios que cobran cuotas bajas no están afectados”.
La resolución del Ente, fue recurrida a la justicia por el abogado Cristobal Cánaves, apoderado de la Arquideócesis de Salta, quien presentó un amparo a la jueza Cecilia Ávila Ricci en nombre de varios colegios privados salteños que insisten en no pagar el servicio de agua como les corresponde. Al respecto, Morello indicio que ya trabajan para impugnar el amparo que – según dijo – tiene vicios de formas y la cuestión de fondo es rebatible, declaro al programa “Cuarto Oscuro” de FM La Cuerda 104.5.
Sobre la decisión de terminar con los subsidios, el funcionario reconoció que la medida “cuenta con un gran apoyo popular”. “Hay cansancio de la gente frente a aquellos que tienen privilegios, la Iglesia tiene poder y privilegios, y nosotros tomamos la decisión de ir contra ese privilegio y recibimos el respaldo de la sociedad” valoró y destacó que “también es importante la unidad de criterio en el directorio del Ente Regulador para poder llevar adelante esta medida”.
Finalmente, Morello informó que “estamos hablando de unos 700 mil pesos mensuales que ya estamos redireccionando a entidades de bien público como clubes, comedores, merenderos, centros vecinales y otras asociaciones sociales que no cobran cuota y prestan un servicio a la comunidad” y recordó que “estos subsidios en beneficio del Arzobispado son otorgados en función de dos leyes del año 1953 que deberían revisarse en la Legislatura”.
